¿Ansiedad laboral contagiosa? Descubre cómo te afecta y cómo evitarlo - universe4men

¿Ansiedad laboral contagiosa? Descubre cómo te afecta y cómo evitarlo

¿Alguna vez te has preguntado si la ansiedad en el trabajo puede ser «contagiosa»? Es común sentir que el estrés de un compañero se transmite, creando un ambiente laboral tenso y agobiante. Aunque la ansiedad no se contagia como un virus, los mecanismos que la generan sí pueden influir en nuestro estado de ánimo y rendimiento.

De hecho, la ansiedad en el ámbito familiar también refleja este fenómeno. Un estudio reveló que la ansiedad infantil rara vez es un problema aislado. Padres con altos niveles de ansiedad a menudo transmiten esta sensación a sus hijos, creando un círculo vicioso difícil de romper. La sobreprotección y el control excesivo pueden predisponer a los niños a comportamientos ansiosos, limitando su capacidad para afrontar desafíos.

El estrés laboral puede infiltrarse en el hogar y viceversa. Nuestros compañeros y superiores tienen un impacto significativo en nuestro sistema nervioso. Si trabajamos cerca de personas constantemente preocupadas, es probable que desarrollemos aprensión hacia ciertos temas y situaciones. En este sentido, el psicoterapeuta Stefano Bartoli aclara: «No es la ansiedad en sí lo que se contagia, sino el mecanismo que la genera».

¿Cómo se manifiesta esto en la práctica? Imagina compañeros que se desahogan constantemente sobre sus miedos a cometer errores o a no estar a la altura. Al escuchar sus preocupaciones, es como si cargáramos con una parte de su peso. Si no somos capaces de «soltar lastre», podemos desarrollar una aprensión similar, sintiendo la necesidad de ser siempre perfectos.

Es importante destacar que no todos los entornos laborales fomentan la ansiedad. La complejidad y las responsabilidades de cada puesto influyen. En trabajos que exigen alta precisión y donde el riesgo de error es constante, la necesidad de control puede generar estados de ansiedad intensos. Cuando estas estrategias de control se vuelven rígidas, incluso pueden derivar en trastornos obsesivo-compulsivos.

Resulta curioso observar cómo muchos comportamientos comunes en el trabajo están impulsados por una ansiedad subyacente: la verificación constante de correos electrónicos, la costumbre de llevar trabajo a casa, el deseo de proyectar una imagen de perfección… Todos estos actos pueden ser síntomas de una ansiedad descontrolada.

Bartoli señala que la ansiedad tiende a escalar en trabajadores exitosos que, por temor a no cumplir con las expectativas, desarrollan la convicción de que deben hacerlo todo bien. Para mantener ese nivel, aumentan su carga laboral, como el autónomo que acepta más proyectos de los que puede manejar. Esta sobrecarga conduce inevitablemente a errores, que a su vez alimentan la necesidad de un control continuo, generando estrés y ansiedad generalizada.

La hustle culture, que nos impulsa a superar constantemente nuestros límites, también juega un papel importante. Esta mentalidad ha inculcado la idea de que el éxito laboral exige una dedicación total, reforzando la creencia de que no podemos permitirnos cometer errores. Sin embargo, los errores son oportunidades para crecer y aprender.

Pero el mayor perjuicio de la cultura del «hustle», según Bartoli, es la identificación de nuestra identidad con nuestro rol profesional. Esto tiene un efecto secundario peligroso: cuando cometemos un error, nos sentimos ineptos. El miedo al fracaso nos lleva a estar siempre disponibles y conectados, tratando de evitar cualquier equivocación.

¿Cómo podemos abordar este problema? Primero, debemos recordar que la búsqueda de la perfección siempre nos llevará a cometer errores. El trabajo es un medio para alcanzar otros objetivos, no la esencia de nuestra vida. Aprender a gestionar nuestra contribución profesional, establecer límites y aceptar la posibilidad de cometer errores no solo no limita nuestro rendimiento, sino que lo mejora. Encontrar un equilibrio es clave.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *